La cirugía se realiza habitualmente de forma ambulatoria, pudiendo dar de alta al paciente unas horas tras la intervención. Los primeros días es importante no coger pesos con la mano intervenida y evitar actividades que puedan retrasar la cicatrización o que produzcan inflamación sobre la zona. Si la afección se trata apropiadamente, normalmente no se presentan complicaciones. Si no se trata, el nervio puede presentar daño, causando hormigueo, entumecimiento y debilidad permanente.